lunes, 25 de enero de 2010

ya olvidé mis propias palabras...


Sigues en mi mente, y ya no sé que más hacer, me desespera esta situación en la que sólo yo estoy. Vos todavía estas donde siempre estuviste, a millas de distancia de mí y sin distinguirme.
No es dolor lo que siento por no tenerte, es depresión o angustia. Ya no aguanto, ya no soporto, mi corazón, mi cuerpo, mi alma, mi ser, mi
YO piden de ti. Te esta esperando sin rendirse, aunque sabe que nunca vendrás; quiere tenerte cerca, porque eres vital. He perdido la cuenta de cómo mi cuerpo se deteriora sin tu amor: mis labios se secan por no poder darte un beso, mis brazos se endurecen de no poderte abrazar, mis ojos lloran por no poderte ver, mis piernas no se mueven del no poder correr hacia ti, mi corazón no quiere latir mas porque le parece inútil, mi alma se hace polvo del tiempo que ha esperado.
Programé miles de formas en decirte que te amo, y ninguna ejecuté. Hice miles de historias sobre nosotros, y jamás las escribí. Hice miles señales para que me notaras, pero no me lograste ver.
Juro que nunca antes había sentido tal amor por un chico, tal deseo de tenerlo cerca de mí. No es obsesión, es locura por él- no lo controlo día y noche, no me la paso mirándolo con la cámara que hay en planta baja, pero si hago lo posible para encontrármelo- solo eso.
Con vos me encuentro en la nada misma, arrollada por conflictos muy elevados para mi capacidad intelectual; pero sabiendo que si una palabra tuya se dirige a mi fuera del contexto “vecinos”, toda esa falta de comprensión regresaría a mi en un instante. Si una vocal o consonante sonara por un simple movimiento de tu boca, no siendo una simple respuesta a algo cotidiano, sino como algo más, mi energía perdida por luchar sería recobrada, mi vida volvería a tener color y no me importaría ninguna adversidad, porque tendría el dulce sonido de tu voz. Ya no serían películas mudas las que rondarían en mi cabeza.
Mi vida gira en tu entorno, me volví tu siervo dependiente, tu servidora sin instrucciones, me volví esclava de tu amor. Un amor que solo yo siento. Un amor no correspondido tal vez. Un amor que va más allá de lo explicable, sobrepasando en una carrera a lo inexplicable. Un amor feliz, pero doloroso.
Se me acaban las letras, el abecedario es pequeño para poner cada palabra que exprese mis sentimientos; hasta las palabras eternas son insuficientes para escribir apenas una oración. Todo esto lo produce el amor. Te amo…
Esperaré por ti eternamente, hasta que el mundo se acabe.

YA HABÍA OLVIDADO ESTAS PALABRAS ESCRITAS ESPECIALMENTE PARA ÉL, MI ANTIGUA Y ACTUAL RAZÓN DE VIVIR.

0 comentarios:

Publicar un comentario

lunes, 25 de enero de 2010

ya olvidé mis propias palabras...

Publicado por it's the same old story en 18:45

Sigues en mi mente, y ya no sé que más hacer, me desespera esta situación en la que sólo yo estoy. Vos todavía estas donde siempre estuviste, a millas de distancia de mí y sin distinguirme.
No es dolor lo que siento por no tenerte, es depresión o angustia. Ya no aguanto, ya no soporto, mi corazón, mi cuerpo, mi alma, mi ser, mi
YO piden de ti. Te esta esperando sin rendirse, aunque sabe que nunca vendrás; quiere tenerte cerca, porque eres vital. He perdido la cuenta de cómo mi cuerpo se deteriora sin tu amor: mis labios se secan por no poder darte un beso, mis brazos se endurecen de no poderte abrazar, mis ojos lloran por no poderte ver, mis piernas no se mueven del no poder correr hacia ti, mi corazón no quiere latir mas porque le parece inútil, mi alma se hace polvo del tiempo que ha esperado.
Programé miles de formas en decirte que te amo, y ninguna ejecuté. Hice miles de historias sobre nosotros, y jamás las escribí. Hice miles señales para que me notaras, pero no me lograste ver.
Juro que nunca antes había sentido tal amor por un chico, tal deseo de tenerlo cerca de mí. No es obsesión, es locura por él- no lo controlo día y noche, no me la paso mirándolo con la cámara que hay en planta baja, pero si hago lo posible para encontrármelo- solo eso.
Con vos me encuentro en la nada misma, arrollada por conflictos muy elevados para mi capacidad intelectual; pero sabiendo que si una palabra tuya se dirige a mi fuera del contexto “vecinos”, toda esa falta de comprensión regresaría a mi en un instante. Si una vocal o consonante sonara por un simple movimiento de tu boca, no siendo una simple respuesta a algo cotidiano, sino como algo más, mi energía perdida por luchar sería recobrada, mi vida volvería a tener color y no me importaría ninguna adversidad, porque tendría el dulce sonido de tu voz. Ya no serían películas mudas las que rondarían en mi cabeza.
Mi vida gira en tu entorno, me volví tu siervo dependiente, tu servidora sin instrucciones, me volví esclava de tu amor. Un amor que solo yo siento. Un amor no correspondido tal vez. Un amor que va más allá de lo explicable, sobrepasando en una carrera a lo inexplicable. Un amor feliz, pero doloroso.
Se me acaban las letras, el abecedario es pequeño para poner cada palabra que exprese mis sentimientos; hasta las palabras eternas son insuficientes para escribir apenas una oración. Todo esto lo produce el amor. Te amo…
Esperaré por ti eternamente, hasta que el mundo se acabe.

YA HABÍA OLVIDADO ESTAS PALABRAS ESCRITAS ESPECIALMENTE PARA ÉL, MI ANTIGUA Y ACTUAL RAZÓN DE VIVIR.

0 comentarios on "ya olvidé mis propias palabras..."

Publicar un comentario